miércoles, noviembre 07, 2007

The Boys (USA)

Hoy hablamos de uno de los grupos más extraños de los que se haya podido escribir nunca. Y esta condición se extiende a varios niveles: en primer lugar, extraños porque apenas se encuentra información sobre ellos. Sus grabaciones como grupo fueron mucho más que escuetas, tan sólo tres singles y un par de canciones en un recopilatorio, en el periodo que se extiende de 1975 a 1979. Y en segundo lugar, también extraños por su aspecto, muy influenciado por todo el glam rock y los New York Dolls, a pesar de que musicalmente bebían del power-pop clásico y de la música de principios-mediados de los sesenta.

Porque estos cuatro chicos más bien poco agraciados, demasiado inconstantes en su trabajo e incapaces de llevar su música a caminos más amplios, son uno de los grupos esenciales del power-pop de finales de los setenta. Estamos hablando de esos grupos que grababan un single para después desaparecer, pero que sólo con eso dejaban una huella indeleble para el resto de los años, gracias a recopilaciones apasionadas que se esforzaban una y otra vez en actualizar su memoria. The Boys, de Nebraska (no confundir con los ingleses o los australianos), dieron forma a una obra excepcional con tan sólo ocho canciones. Melodías invocadas en la magia de los singles de los primeros Beatles, potencia guitarrera heredada de los discos de Badfinger y Big Star y una facilidad asombrosa para los himnos es lo que nos ofrecen en su minúscula discografía. Y especialmente, un innegable y encantador aroma a leyenda, propiciado por el inmenso poder de sus canciones, entre las cuales brilla con luz propia, como veremos, "(Baby) It's You". Cualquier canción titulada así siempre será buena. Parece un misterio arrancado de fórmulas esotéricas.

Sus grabaciones empiezan en 1975, con el primer single, editado por Outrage: (She's My Girl) She's All mine / I'm Not Satisfied. La primera de ellas es una canción festiva, casi rockera, pero con una melodía perfectamente definida e insistente, muy parecida a cuando Badfinger se ponían duros. Pegadiza de buenas a primeras, es un inicio estupendo para un grupo que se presenta. La cara B nos presenta su faceta más refinada, las guitarras siguen ahí, pero la melodía se hace más sutil, más cargada de emociones, y los coros brotan por doquier. Es una delicia escuchar el estribillo, cargado de vulnerabilidad, a pesar del envoltorio brioso. Todo sigue siendo terriblemente inmediato y adictivo, aquí con el estímulo de parecer una canción de la invasión británica un poco subida de revoluciones.

Su segundo single llega dos años después, en 1977: You Make Me Shake / We're Too Young. La primera es un himno del power-pop, que contiene su energía para estallar en un estribillo luminoso, radiante, con coros por todas partes. A pesar de la dulzura de la melodía, todavía resultan algo primitivos en cuanto a arreglos e instrumentación, pero de esa tensión, quizá la fórmula quintaesencial del power-pop, surge una canción irresistible, adhesiva, ilusionante. Repiten la fórmula con "We're To Young", otro himno del mismo nivel que la cara anterior, basado en un riff de guitarra retorcido y otra vez en voces que, a pesar de la dureza, no temen mostrarse como sensibles. Y atención, porque aquí las armonías ya contienen un cierto nivel de complejidad que les conducirá a su obra maestra absoluta en el single siguiente.

Porque ahí está, en 1979, y ya con Titan Records, (Baby) It's You / Bad Little Girl. Todo es entrañable y especial en este single, incluido el diseño de portada, con el blanco y negro que solían utilizar, más feos que nunca, pero carismáticos, y con las letras de su grupo en una curiosa, atractiva e inolvidable tipografía. Podría entenderse que se hubieran pasado los dos años con respecto al anterior single perfeccionando únicamente la maravilla que es "(Baby) It's You", reconozcámoslo de una vez, una de las mejores canciones que se han compuesto nunca en el pop, digna de figurar entre las diez más imprescindibles, y que justifica por sí sola toda su existencia como grupo. Una composición extremadamente compleja, a pesar de la sencillez de sus formas, con estructura cambiante ya desde el comienzo -una voz femenina repitiendo una frase en francés sobre un misterioso piano-, una línea de guitarra creciente, hasta que aparece el ritmo trotón característico de la canción, la voz madura, personal, arrebatada bordando la melodía, como si hubiera nacido para cantarla, y ese genial detalle de las voces expiradas como las de los Zombies en "Time of the Season". Todo esto hubiera hecho que la canción fuese especial en sí misma, pero es que todavía falta el estribillo, una explosión del pop de quilates, una joya incrustada en una estructura de la nueva ola, con coros y reminiscencias del mejor Spector y del mejor Bacharach, unos segundos atemporales que ponen la piel de gallina. Personalmente, descubrí esta canción en un recopilatorio titulado Metrojets (primer volumen), hace unos años, y jamás he podido olvidarla. Toda una experiencia, estética y humana, capaz de cambiar a cualquiera. La cara B, "Bad Little Girl", es más convencional, y también más áspera y agresiva que todo lo que habían grabado antes (recuerdan mucho a los New York Dolls). Incluso prescinden del estribillo sensible.

Ya no editaron nada más bajo su nombre. Sus dos siguientes perlas hay que buscarlas en un mítico recopilatorio de power-pop que Titan Records publicó en 1980, Just Another Pop Album, donde se incluyen dos nuevas canciones, aparte de las ya conocidas "(Baby) It's You" y "We're Too Young". Uno de los nuevos temas es "On A Night Like This", aquí suenan más refinados que nunca, lanzados sin complejos al placer de la melodía, pero eso sí, sin llegar a la sofisticación de "(Baby) It's You" y todavía con las guitarras acechantes al fondo. Es una composición pegadiza, con mucha influencia del pop de cámara que emergió entre el 66 y el 67, equilibrada, elegante. Y con "Tell Me It's You" se cierra el círculo. Parece un experimento previo a su obra maestra, pero igualmente dulce, seductor, con voces susurrantes como contrapunto a la melodía y con un decidido interés hacia el pop adolescente de principios de los sesenta.

No deja de ser curioso que, más allá de la ausencia de una información detallada de su vida como grupo, lo que sí abunda por la red son las muestras de reconocimiento y de pasión hacia las ocho canciones que The Boys llegaron a editar. No es frecuente que un grupo llegue tan dentro con tan poco, y que su culto haya pervivido a lo largo de los años a pesar de que encontrar sus canciones no es algo precisamente fácil. En el siguiente enlace están todas recopiladas, incluyendo las portadas de sus singles:

The Boys (USA). Singles and Songs (1975-1980).

Colgados originalmente en Powerpop criminals

5 comentarios:

Anónimo dijo...

No son pocas las veces que he intentando, sin éxito, encontrar material de esta banda, y me alegra enormemente la aportación que nos haces.

Muchas gracias!

P.D.: enhorabuena por el blog, de lo mejorcito en la materia.

Anónimo dijo...

Enorme este grupo. Lastima que no se haya publicado todavia una reedicion
añadiendo mas material,tipo maquetas , si es que lo tienen.

Por cierto, su historia me recuerda a los Dovers http://en.wikipedia.org/wiki/The_Dovers

4 singles y ocho canciones increibles

Mr. Glasshead dijo...

laresd: muchas gracias por el comentario, espero que disfrutes con estas canciones.

powertoni: no conocía a los Dovers, pero a raíz de tu comentario me he bajado sus singles y me han parecido buenísimos

Enric Caujapé dijo...

Segueixo omplint el meu disc dur extern de petites joies, gracies a tu: Re-descubrint !!
Mil Gracies company !!!

Mr. Glasshead dijo...

Gràcies a tu per visitar aquest blog, amic.